Ni el rosario colgado en el pecho durante todos los noventa y cuatro minutos de partido sirvió una jornada más para romper una caída al abismo. Un Javier Olaizola que, inusualmente, entró en la sala de prensa de Santo Domingo después del míster local lo que normalmente es totalmente al contrario. Se especulaba entonces un posible gabinete de crisis entre la dirección del club y el míster donostiarra para tomar una decisión en la figura de Olaizola pero tras empezar la comparecencia dejó clara su continuidad en un barco que navega a la deriva. «Solo he tomado un tiempo para pensar bien las declaraciones que tengo que hacer», declaraba el entrenador bermellón apuntando posteriormente los mismos vacablos de cada jornada. «Estoy jodido. Con media ocasión el rival nos marca y nosotros con ocasiones claras no las metemos. Ya dije el jueves que era importantísimo ganar pero más no perder porque el perder era un drama y evidentemente quedan pocas jornadas y estamos en una situación muy muy jodida».

Yo tengo fe en los chavales porque trabajan muy bien pero hay que dar un paso adelante porque no salimos de allí

Tuvo también palabras para una radiografía de encuentro «para nada bueno» donde explicó los puntos más flojos de los suyos. «El primer tiempo hemos salido nerviosos, no hemos dado ni tres pases seguidos. Y eso pasa por la responsabilidad y no puede ser porque con el paso de las semanas irá a peor. Yo en el descanso he pegado mil gritos y en la segunda parte es cuando hemos empezado a jugar a futbol. Son una final todo los partidos Nos estamos jugando el futuro del club, el futuro de muchos empleados». Preguntado por si estaría meditánsode dar un paso al lado con una situación más que preocupante -12 puntos de 48 posibles Olaizola en el banquillo bermellón-. «No voy a dar ningún paso atrás hasta el momento en que vea que no tengo fuerza y confianza. Pero si hace cuatro temporadas saqué al equipo adelante, tengo plena confianza que lo puedo sacar. Ahora, si el club decide tomar alguna decisión yo no pondría ninguna pega» afirmaba Javier Olaizola que apuntó por último con su punto de vista dos caminos para lo que queda de competición: «dejarse llevar y perder o seguir trabajando fuerte y ganar el partido siguiente».