Dos hombres y la zaga bermellona, son los culpables de haber formado un muro prácticamente infranqueable para los rivales del Mallorca B.
Miquel Parera y Jaume Valens solo han encajado un gol en los últimos ocho partidos disputados. El único gol llegó de las botas de Samu en la última derrota del equipo de Javier Olaizola, un gol en el cual Parera no pudo hacer nada para evitarlo. El Eldense fue el último en llevarse los tres puntos de Son Bibiloni.
El portero manacorí tomó el relevo de Jaume Valens quien debía ir con el primer equipo para suplir la lesión de Santamaría. El joven portero, encajó perfectamente la posición y se hizo con el puesto de portero titular realizando algunas intervenciones importantes. Valens al volver, debió sentarse en el banquillo durante siete partidos consecutivos por el buen estado de forma de su compañero.
En este periodo de tiempo, Valencia Mestalla, Badalona, Lleida y L’Hospitalet, no pudieron perforar la portería rival. La defensa consolidada fue también una de las culpables de la hazaña.
Al octavo partido, Olaizola decidió devolver a Valens a la titularidad ante el Prat. El palmesano volvió al equipo por la puerta grande y siguiendo la racha de partidos sin encajar. Con este partido sumaban cuatro partidos sin encajar un solo tanto.
Y llegamos al pasado fin de semana. El Mallorca B visitaba la Ciudad Deportiva de Dani Jarque, Olaizola elegía a Valens como portero titular. El portero, realizó un gran partido impidiendo el gol perico en todo momento, además, logró atajar un penalti que podría haber cambiado la suerte mallorquinista.
El próximo partido será ante el Ebro en Son Bibiloni donde aún no sabemos a quién alienará bajo los palos el técnico vasco. Lo que si sabemos es que sea quien sea que se ponga los guantes, le pondrá las cosas difíciles al rival.